Por Aura Colón Solá
Horas
antes de que se retomen las labores académicas y la huelga estudiantil en el
Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) el Senado aprobó,
en el primer día de sesión, el proyecto que enmienda el fondo especial para
becas de la UPR, confirmó la agencia de noticias InterNews.
Foto/Aura Colón Solá |
Los
subsiguientes años fiscales se transferirá al Fondo una cantidad no menor de 30
millones de dólares mediante abonos mensuales de no menos de 2.5 millones,
expone el proyecto de ley 1940.
Las
reacciones de los líderes estudiantiles, que desde tempranas horas de la mañana
se manifestaron frente a la casa de las leyes, fueron agridulces ante la
noticia la aprobación de esta enmienda que todavía no se refleja en la Oficina de Servicios Legislativos.
“Esto
responde parcialmente al reclamo del movimiento estudiantil y no resuelve el
problema. Siguen existiendo dos deficiencias principales en el proyecto. Éstas
son sus criterios y la subjetividad y, dos, la estructura administrativa que se
tiene que montar para la distribución de las becas. No hay claridad en cuanto a
cuál será el criterio para la necesidad económica y no hay una propuesta lista aún
para distribuir el dinero. Además, no es una solución concreta a la cuota
porque las becas no van a estar listas al momento de pagar la cuota y los
estudiantes que no la paguen se quedan fuera comoquiera. Esto no cambia la
postura del estudiantado”, sostuvo Xiomara Caro, miembra del Comité de
Representación Estudiantil (CRE). De la misma forma el
Síndico Estudiantil, René Vargas, mencionó anteriormente que con el sistema que
se necesita estructurar para la evaluación de candidatos y la posterior
distribución de las becas, los estudiantes no tendrían el dinero en sus manos
hasta el mes de marzo, posiblemente.
Por
su parte, Armando Santiago, uno de los líderes de los esfuerzos de cabildeo por
parte de los estudiantes dijo que continuarán “las conversaciones con las
senadoras Kimmey Raschke y Migdalia Padilla, presidentas de las comisiones de
Educación y Hacienda en el Senado, respectivamente, para conseguir que esos
fondos puedan proveer los subsidios necesarios a los estudiantes sin que se
incurra en gastos operacionales, administrativos y burocráticos a través de la
Junta Evaluadora que se propone los administre. Reducir la cuota en un 75%
sería un gran logro para los estudiantes, y la enmienda que proponemos tendría
precisamente ese efecto”.
Asimismo,
María Soledad Dávila, miembra del CRE y estudiante de Arquitectura, expresó que
“el compromiso de los $30 millones muy bien pudo ir acompañado de una directriz
para que fuera dirigido como fondo restricto que sustituya la cuota ya que el
BGF (Banco Gubernamental de Fomento) dijo que no tendría problemas con esa
medida”.
Aún
con esta ayuda económica disponible sólo se cubrirá a 37, 500 estudiantes de los
más de 60 mil que cursan estudios en el Sistema UPR.
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