Por Mariana Muñiz Lara y Amaris
Torres Rivera
Fotos por Jesús Vázquez
“Bienvenidos a la ciudadanía
plena”, declaró Samuel Silva Gotay, profesor distinguido de la Facultad de
Ciencias Sociales del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico
(UPR), para felicitar a más de 400 estudiantes que, según dijo, optaron por una
concepción de ciudadanía en la que la responsabilidad por el otro es esencial.
Hoy, 13 de junio de
2010, se celebró por primera vez una graduación de todo el Sistema de la UPR.
Aunque siguió muchos de los protocolos de las graduaciones de esta institución,
no fue una ceremonia de colación de grados cualquiera, sino un acto simbólico e
histórico en el cual se le confirió el grado honorífico de ciudadano y
ciudadana ejemplar a los graduandos de los 11 recintos y la escuela superior de
la UPR, así como a los demás estudiantes que han dado la lucha por una universidad
pública, accesible y de excelencia para presentes y futuras generaciones.
Cientos de estudiantes,
junto a compañeros, profesores, empleados no docentes, familiares y amigos, se
dieron cita frente al portón principal del recinto riopedrense en la Avenida
Ponce de León, para celebrar como comunidad universitaria, frente al pueblo que
los ha apoyado en más de 50 días de huelga estudiantil.
La emoción reinaba en
el pasillo frontal de Plaza Universitaria, donde los familiares obsequiaban
bombas de “Congrats Grad” a los jóvenes, los graduados les medían los birretes
a sus hijos y hermanitos, y se imponían los abrazos entre amigos. Cuando los
estudiantes se organizaban para el desfile, acomodándose sus togas y birretes,
los padres llegaron a acompañarlos musicalmente con panderos, que contagiaron a
los alumnos para cantar consignas típicas de la huelga, como “juventud
combatiente, luchando por el futuro y el presente” y “alerta que camina, la
juventud unida luchando por la vida”.
Poco antes de las tres
de la tarde, dio inicio la graduación simbólica con un desfile de claustrales,
quienes formaron dos largas filas paralelas, en guardia de honor, entre las
cuales entraron los miembros del CNN, los representantes de la Coordinadora
Nacional de Recintos (CONARU), los graduandos de la University High School
(UHS) y los estudiantes graduandos de Doctorado, Juris Doctor, Maestría y
Bachillerato. Con rostros llenos de entusiasmo -algunos junto a sus hijos,
otros ondeando la monoestrellada-, los estudiantes desfilaron entre aplausos y
abrazos de sus profesores, mientras el presentador de la actividad leía un
discurso del escritor latinoamericano Eduardo Galeano dedicado a los
estudiantes puertorriqueños. "Los
pueblos que no escuchan los reclamos de sus estudiantes corren el peligro de
quedarse sin futuro”, leía una sección de este escrito, que también
se utilizó para adornar la parte lateral de la tarima. Los alumnos le
devolvieron el aplauso a los clausúrales cuando se dirigieron a sus asientos.
Entonces, el himno de
Puerto Rico fue interpretado por la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico, que
también está sufriendo una amenaza de desmantelamiento por los recortes en
fondos gubernamentales. La comunidad universitaria declaró su solidaridad con
los músicos.
El síndico estudiantil
electo René Vargas Martínez y el síndico claustral electo Waldemiro Vélez
presidieron la ceremonia. Víctor Vega, representante del Recinto de Utuado en
el Comité Negociador Nacional (CNN) y graduando de Horticultura expresó a DESDE
ADENTRO que “a pesar de que quizás no me gradúo hoy como se supone, me siento
orgulloso de todos los logros del Comité y de que, por primera vez, se logró
una huelga de tal magnitud; los once recintos. Seguiremos luchando por nuestros
derechos”.
María Gisela Rosado,
presidenta de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU),
encabezó los mensajes a los graduandos, señalando que, durante la huelga, la
Universidad no ha perdido su función académica, pues han promovido el debate,
han forzado el cambio y han transformado su comunidad. El síndico estudiantil,
Carlos Pagán Cuevas, le cedió parte de su turno al micrófono a Gabriel Díaz,
estudiante graduando de la UHS, quien expresó que “la lucha de ustedes es la
lucha de nosotros”, no sólo porque la escuela superior es parte de la UPR y “la
Avenida Gándara que nos separa es sólo un error geográfico”, sino también
porque defender la Universidad es responsabilidad de todos los puertorriqueños
y las puertorriqueñas. Pagán indicó que la UPR está en crisis, pero hay otras
formas de atenderla, y que ha sido difícil ser síndico en una Junta en la que
los representantes internos de la Universidad son una minoría ante los entes
externos.
En su mensaje, la
síndica claustral Carmen Elisa Cotto destacó que tanto la graduación simbólica
como la lucha estudiantil sistémica "representan la UPR unida en defensa
por la educación pública y el acceso a todos los estudiantes que vendrán a
nuestra Universidad". Por su parte, Aníbal Núñez, portavoz del CNN,
expresó que le enorgullece ser la voz del estudiantado y reafirmó que "los
procesos democráticos tienen cabida en los procesos de nuestra universidad".
Resaltó, además, que la UPR está en serio peligro, ya que la administración
universitaria tiene una “visión microscópica de la educación superior”, al
entenderla como un servicio por el que se paga y no como un proyecto social,
por lo que el objetivo que mantienen es el de defender el acceso a ésta. Describió
a los estudiantes, “la razón de ser de esta universidad”, como la esperanza de
Puerto Rico y como personas dispuestas “a luchar tanto por lo que es como por
lo que debe ser”. Asimismo, la estudiante Nicole Teresa Ramos, portavoz de la
CONARU por el Recinto de Arecibo y quien utilizó sus muletas como símbolo de
los obstáculos que los estudiantes han vencido, señaló que los alumnos eran
también “educadores de justicia, moral y paz” y que su lucha “por el alto
desarrollo de la patria” y en “genuino servicio al futuro” trascendía la
huelga. “No somos una simple hoja, hemos dejado una gran huella”, dijo, en
referencia a unos versos de Rafael Cancel Miranda.
El orador principal fue
el doctor Silva Gotay, quien ostenta la distinción más alta a un docente en
servicio a sus 53 años de enseñanza. El experto en Teología y Sociología de la
Religión, en entrevista con DESDE ADENTRO, expresó que “es un gran honor que me
hayan escogido para esto. Me parece muy importante reconocer la integridad y
valentía de los estudiantes que se gradúan. Se gradúan de un grado en
integridad, grado que muy pocas personas en este país ostentan. Hacemos un
llamado a la Junta de Síndicos a emular a los estudiantes en su sentido de
justicia para el País”. Silva Gotay dedicó su discurso a los estudiantes que
resistieron la tentación de desistir y a los profesores que se han mantenido
apoyándolos día y noche frente a los portones. Resaltó que entre las
generaciones de protestantes de pasadas décadas y la presente prevalecen el
sentido de respeto mutuo, el deseo de diálogo y la firmeza ante la adversidad y
la injusticia.
Tras sus palabras, que
elogiaron la resistencia de los jóvenes frente a “amenazas de cárcel y palos de
bestias azules”, un estudiante reconoció a José “Osito” Pérez entre los
espectadores. El público coreó frases de apoyo para el joven que fue brutalmente
agredido en medio de una protesta al gobernador Luis Fortuño realizada el mes
pasado en el Hotel Sheraton del Centro de Convenciones.
El Recinto de Ciencias
Médicas se hizo sentir cuando su coro interpretó la danza Perla del Caribe y el
Himno al Alma Máter. Los estudiantes cantaron luego la versión huelgaria del
himno universitario.
La presentación de la
clase graduanda, a cargo de los síndicos electos, destacó que la misma estaba
compuesta por personas que ejercen sus derechos constitucionales a la libertad
de expresión y de asociación en defensa de la educación. Vargas Martínez
exhortó a sus compañeros a actuar responsablemente en la construcción de una
sociedad democrática y plural. Entonces, confirieron a los estudiantes el grado
honorario de ciudadano y ciudadana ejemplar.
“Has demostrado un
compromiso indiscutible con tu país, en la defensa férrea de una educación
universitaria pública de calidad, accesible para nuestro pueblo. Con tu
esfuerzo y liderazgo, has dado cátedra de humanismo, valentía y perseverancia,
otras cualidades honorables. Tu responsabilidad social y tu clamor de justicia,
enaltecen tu espíritu. Tu disponibilidad para el trabajo en equipo y tu sentido
de ética basado en el respeto a la dignidad humana te capacitan para enfrentar
un mundo lleno de situaciones que necesitan solución y que clama por la
solidaridad y la creatividad de los seres humanos. Eres digno ejemplo para las
generaciones venideras. Por estas y otras razones, te conferimos el grado
honorario de CIUDADANO(A) EJEMPLAR, en tus manos queda nuestro futuro. Dado hoy
domingo, trece de junio de dos mil diez, frente a la Universidad de Puerto
Rico, Recinto de Río Piedras”, lee el diploma entregado a los
estudiantes, que está firmado por el Comité Claustral del Sistema UPR, los
síndicos Cotto y Pagán, la profesora Rosado; Luis Sánchez Longo, presidente de
la Confederación de Asociaciones de Profesores Universitarios (CONAPU), y los
miembros del CNN.
Los primeros en recibir
sus certificados fueron los estudiantes negociadores, seguidos por los
huelguistas no graduandos. Luego de un obsequio musical de la Orquesta
Sinfónica de Puerto Rico, se confirió el grado honorario de escuela superior a
la Clase 2010 de la UHS, indicándoles que “en sus manos queda nuestro futuro y nuestro
presente”. Las profesoras Ivette Torres y María Collazo fueron homenajeadas por
culminar sus doctorados y recibieron en tarima las esclavinas representativas
de sus grados. La Clase 2010 de la UPR fue presentada como una que “continuará
construyendo sociedad y país, de cara a un futuro justo y sostenible”, y sus
miembros recibieron sus diplomas en tarima, desde donde se leyeron todos sus
nombres. Se hizo una distinción especial para los graduados de programas de
doctorado y Juris Doctor.
Antes de culminar la
ceremonia, se dio un agradecimiento particular a los abogados que han brindado
sus servicios de forma gratuita defendiendo a los estudiantes en los tribunales
y a Rosalinda Soto, una de las madres organizadoras del evento. Su hijo,
Waldemiro Vélez Soto, estudiante negociador, la acompañó en la tarima, y luego,
el padre de éste, agradeció a todos los estudiantes por ser motivo de gran
orgullo para sus padres. La profesora Zoraida Santiago cerró los actos cantando
“Que vivan los estudiantes”.
La ceremonia culminó con
el lanzamiento al aire de los birretes y rostros llenos de risas y lágrimas,
entre abrazos y besos. Los estudiantes expresaban su enorme satisfacción por lo
que habían logrado: una distinción mayor que cualquier diploma, el grado honorario
de ciudadano ejemplar por su ardua lucha por el derecho a la educación.
Sin embargo, la emotiva
actividad tuvo un segundo gran final. Al fondo de la calle, se escucharon
golpes de panderos. Entonces, comenzó a desfilar hacia la tarima la comparsa
del grupo de teatro de protesta Papel Machete con su ya tradicional muñeco
gigante del estudiante con camisa que recuerda que “La UPR no se vende”, quien
no llevaba su típica gorra roja sino un birrete de graduación. Al son de plena,
los graduados celebraron junto a sus amigos y familiares, y realizaron su
desfile de salida para continuar su lucha en busca de abrir los portones con
acuerdos que aseguren la continuidad de esta universidad pública, la que
produce ciudadanos ejemplares.
!FELICIDADES GRADUANDOS! Es grandioso ver que tenemos jovenes con conciencia, que luchan por el bien comun y no pienzan unicamente en sus barrigas. Ustedes han sido grandiosos pues,tienen la capacidad, y el corazon para ESTUDIRAR, TRABAJAR, LUCHAR Y GRADUARSE CON ALTOS HONORES y con mucho, mucho honor. OTROSSSS, NO PUEDEN DECIR LO MISMO. Nuevamente, !FELICIDADES JOVENES, UPR, 11 RECINTOS, UNA UNIVERSIDAD!
ResponderEliminarPOR FAVOR, no pude estar presente, lamentablemente, podrian decirme si puedo verlos grabados en algun site. GRACIAS
Gracias por hacerme revivir la mejor graduacion de mi vida. Esta es mi tercera en la UPR. La de BA en UPR Ponce, la de MA en UPR Rio Piedras y esta, la mejor, la de Ph.D. Si pudiera echar atras el tiempo y escoger el momento de mi graduacion doctoral hubiese escogido el 13 de junio del 2010 frente a nuestra UPR. El diploma que va a estar en mi pared va a ser ese: Once recintos, Una UPR. Orgullosa de ser 100% producto de la UPR.
ResponderEliminarVamos a ver que trabajos consigues con el diplomita de la mcok graduation......esta tamaña ridiculez lo que si nos permite ver claro es lo poco que valoran la educacion de este pais, que la convierten en una burla.
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